«Confía
calladamente en Jehová, y espérale con paciencia».
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Bendiciones.
Enio
Meditación
Diaria
LUNES 29 DE SETIEMBRE DE 1960
El
Aposento Alto
HABACUC 1:2 “¿Hasta cuando , oh Jehová clamaré, y no oirás?” (RVR)
En el curso de la conversación, un miembro de la
iglesia se expresó así: «DIOS no siempre contesta
nuestras oraciones». Al pedirle explicaciones a un amigo, añadió: «Creo que DIOS a veces contesta con el silencio».
¿No serán estos silencios verdaderas contestaciones
de parte del DIOS de amor?
En muchas ocasiones seguramente no lo entenderemos
así; pero no hay razón porque sea difícil creer que aún en Su silencio DIOS
tiene propósitos sublimes para Sus hijos.
Estos silencios de DIOS a veces nos hacen comprender
mejor la gravedad de nuestros pecados. En otras ocasiones nos sirven de acicate
para buscarle con mayor celo. Sus silencios nos capacitan para llegar a
conocerle como no lo habíamos conocido antes y a prestar atención a las órdenes
que nos envíe por diversas fuentes.
Ciertamente, DIOS a menudo contesta con Su silencio.
Es una de las formas en que nos anuncia su misericordia y Su bondad, Su amor y Su
comprensión.
OREMOS: Oh Señor, ayúdanos a permanecer en quietud delante de
Tí, atentos a Tu voz. Cuando guardes silencio, ilumina nuestra inteligencia
para comprender lo que quieres enseñarnos por medio de ese silencio. Te lo
imploramos en el precioso nombre de Jesús, amén.
Sr.
Carlos T. Gattinoni (Argentina)
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