Mi egocentrismo…
Comparte esta meditación.
Bendiciones,
Enio
Meditación Diaria, JUNIO
7, 2012
SUS BONDADES SON NUEVAS
CADA MAÑANA
LAMENTACIONES 3: 21-23 “Esto traigo a mi corazón,
por esto tengo esperanza: Que las misericordias del SEÑOR jamás terminan, pues
nunca fallan sus bondades; son nuevas cada mañana; ¡Grande es Tu fidelidad!”.
La naturaleza humana se encarga de evitar que entre la gente puedan
existir la armonía y la paz. Todo lo que nos interesa es lo que nos afecta
directamente para bien o para mal.
Si buscamos una solución al problema, lo haremos bajo un criterio de
satisfacción estrictamente personal, ignorando por completo las consecuencias
que éllo pueda traer sobre terceros.
Este egocentrismo, hijo del orgullo, cuya semilla de cizaña logró el
enemigo esparcir en el campo de trigo de nuestro corazón, es el responsable de
que nunca lleguemos a un acuerdo, de que la paz nunca pueda ser permanente y de
que sea tan difícil de amar a nuestro prójimo.
Si en nuestra vida hay conflictos, desacuerdos y falta de interés por
el bienestar de los demás sobre el nuestro propio, es porque esa semilla de
cizaña ha logrado germinar y mezclarse con el trigo de las virtudes y los
talentos sembrados por el Señor.
Estemos siempre pendientes de que la cizaña no se imponga sobre el
trigo. Recordemos que la cizaña no será cortada sino junto con el trigo cuando
éste alcance su madurez. Si la cizaña nos está causando problemas con el
crecimiento del trigo, clamemos a nuestro Padre para que nos ayude a
transformar nuestros pensamientos de manera de que estemos alineados con Su
perfecto plan y no vivamos de acuerdo a nuestras egocéntricas “necesidades”.
Por nuestras acciones mereceríamos castigos severos, pero es allí en
donde entra en acción la misericordia de DIOS, que no nos da el pago que
merecemos, sino el que no nos merecemos; Él siempre actuará con clemencia para
con nosotros pues Él nos ama.
¡Qué bueno es saber que tenemos Quien nos proteja del mal y nos brinde
Su misericordia cada mañana!
Por lo tanto, así como DIOS ofrece misericordia a todo transgresor,
también establece que todo aquel que recibe misericordia, sea misericordioso:“Bienaventurados
los misericordiosos, porque éllos alcanzarán misericordia”.
Seamos sabios para conceder gracia hoy, porque ninguno de nosotros
sabe cuánta misericordia necesitaremos mañana. Aprendamos a dar y a recibir
misericordia. Así como nosotros mismos recibimos este don de DIOS, demos a
otros este mismo regalo. Dejemos que la misericordia sea un estilo de vida para
nosotros.
¡Sólo a DIOS sea la
gloria!
ORACIÓN: Gracias Padre Celestial por las muestras de Tu amor.
Gracias por el nuevo día que me das y por Tus bendiciones. Ayúdame, oh DIOS,
para superar mi egocentrismo y que en todo te agrade. En el nombre de Cristo,
amén.