sábado, julio 25, 2015

PARA SUAVIZAR EL CORAZÓN

Señor, hazme un instrumento de tu paz…
Comparte esta meditación.
Bendiciones,
Enio
Meditación Diaria
PARA SUAVIZAR EL CORAZÓN
SALMOS 25: 8-10 "El Señor es bueno y justo; él corrige la conducta de los pecadores y guía por su camino a los humildes; ¡los instruye en la justicia! 10 Él siempre procede con amor y fidelidad, con los que cumplen su alianza y sus mandamientos."
Si tú mantienes una actitud humilde delante de DIOS, buscándole por medio de Su Palabra, Su presencia saturará tu corazón y te hará dócil y sensible. Así como una relación matrimonial puede comenzar a enfriarse si no se dan los pasos para mantenerla cálida, tu corazón puede endurecerse poco a poco si no buscas acercarte a DIOS.
Tú debes responder con rapidez y obediencia a todo lo que ÉL te diga que hagas para que tu corazón siga siendo suave y receptivo. Entonces al Señor le resultará fácil captar tu atención, y cuando te convenza de pecado, desearás enfrentar el problema de inmediato. Es por ésto que debemos andar en el Espíritu en todo momento.
Si tú crees que DIOS puede estar dirigiéndote en cierta dirección, dedica el tiempo necesario para buscar fervientemente Su voluntad en el asunto, y abras tu corazón para escucharle. Ten cuidado de no ocuparte de otra cosa distinta a lo que DIOS te llamó a hacer originalmente.
Sería trágico trabajar esforzadamente haciendo lo que tú y otros consideran bueno, para descubrir después que tus esfuerzos se agotaron en lograr algo que no era lo que DIOS deseaba.
Resistir la voluntad del Señor equivale a no hacer nada con la vida, lo que te deja con una sensación de vacío. Nada puede reemplazar la voluntad de DIOS, aún cuando Su plan parezca difícil o imposible. Pero si tú confías en ÉL con un corazón dispuesto, no hay límite para lo que DIOS pueda hacer por medio de tu vida.
Dá un paso al frente de obediencia, y di: “Señor, quiero hacer Tu voluntad, cueste lo que cueste”.
ORACIÓN: Señor, a Ti dirijo mi oración. Mi Dios, en Ti confío. Ayúdame a ser un instrumento Tuyo y todo lo que haga sea de Tu agrado. Te lo pido en el nombre de nuestro Señor Jesucristo, amén.

Leer SALMOS 25 (DHH)

ORACIÓN PIDIENDO LA DIRECCIÓN DE DIOS
(1a) De David.
25 (1b) Señor, a ti dirijo mi oración; mi Dios, en ti confío: no dejes que me hunda en la vergüenza. ¡Que no se rían de mí mis enemigos! ¡Que no sea jamás avergonzado ninguno de los que en ti confían! ¡Que sean puestos en vergüenza los que sin motivo se rebelan contra ti!
Señor, muéstrame tus caminos; guíame por tus senderos; guíame, encamíname en tu verdad, pues tú eres mi Dios y Salvador. ¡En ti confío a todas horas!
Señor, acuérdate del amor y la ternura que siempre nos has manifestado, pero no te acuerdes de mis pecados ni del mal que hice en mi juventud. Señor, acuérdate de mí, por tu gran amor y bondad.
El Señor es bueno y justo; él corrige la conducta de los pecadores y guía por su camino a los humildes; ¡los instruye en la justicia! 10 Él siempre procede con amor y fidelidad, con los que cumplen su alianza y sus mandamientos.
11 Señor, es grande mi maldad; perdóname, haz honor a tu nombre. 12 Al hombre que honra al Señor, él le muestra el camino que debe seguir; 13 lo rodea de bienestar y da a sus descendientes posesión del país. 14 El Señor es amigo de quienes lo honran, y les da a conocer su alianza. 15 Siempre dirijo mis ojos al Señor, porque él me libra de todo peligro.
16 Mírame, Señor, y ten compasión de mí, porque estoy solo y afligido. 17 Mi corazón se aflige más y más; líbrame de mis angustias. 18 Mira mis tristezas y trabajos, y perdona mis pecados. 19 Mira cuántos enemigos tengo que sienten por mí un odio mortal. 20 ¡Cuídame, sálvame la vida! ¡No dejes que me hunda en la vergüenza, pues en ti busco protección! 21 Que me protejan mi honradez y mi inocencia, pues en ti he puesto mi confianza.
22 ¡Dios mío, salva a Israel de todas sus angustias!



No hay comentarios.: