¿Problemas? ¿Pruebas?
Comparte esta meditación.
Bendiciones,
Enio
Meditación Diaria
LAS PRUEBAS,
BENDICIONES DISFRAZADAS
SALMOS 63:5 “Mi alma quedará satisfecha como de
un suculento banquete, y con labios jubilosos te alabará mi boca.
¿Qué mejor ocasión que una difícil prueba para que DIOS manifieste Su
inmenso poder y nosotros podamos deleitarnos de Su gloria? Cuando podemos experimentar de primera mano el poder y la gloria de DIOS
en nuestras vidas, nuestra fe en El se afianza y la alabanza brota en forma natural
de nuestro corazón y de nuestros labios.
Por eso es que la
pruebas resultan ser bendiciones disfrazadas. Al final lo que obtenemos de éllas es superior, es mucho más valioso
que las penurias e incomodidades a las que nos vimos expuestos mientras
aguardábamos la respuesta de DIOS.
Quienes nos ha tocado enfrentar valles y desiertos sabemos que siempre
hay una salida. Mientras más problemas
hemos tenido que soportar, más experiencia en esto de las pruebas y las
dificultades hemos atesorado.
Al final nuestra alma quedará rebosante de gozo y agradecimiento hacia
Quien nos supo librar del peligro y Quien nos dio una prueba más de Su infinito
poder y amor por nosotros.
Que nuestros
pensamientos estén constantemente fijos en Él. Que nada distraiga ese darse cuenta que Él está ahí, a nuestro lado,
en todo momento y que todo lo que nos sucede forma parte de Su perfecto y
bendito plan para nosotros.
Por esto, nuestra
actitud debe ser de tranquilidad y confianza en que DIOS pronto ha de salir a nuestro
rescate.
Nuestra actitud debe
ser de agradecimiento a DIOS porque nos ayudó en el pasado y nos volverá a
ayudar en el presente.
¡SÓLO A DIOS SEA LA GLORIA!
ORACIÓN: Padre Celestial,
DIOS creador de todo lo que existe. Tú eres Santo, Santo, Santo. DIOS eterno y
Salvador del mundo. Aquí tu hijo(a) imploro(a) tu gracia y misericordia a pesar
de mis faltas y pecados. Ayúdame a no revelarme, a ser obediente, no buscando
mi propio camino sino el camino de santidad, humildad, amor y justicia.
Aliméntame de tu Palabra que me da vida y esperanza para poder alimentar a los
que tienen hambre de Ti, evangelizando y discipulando a mis hermanos y
hermanas. Sé que Tú me miras. Reconozco mis faltas y errores y te pido que me
perdones. Ayúdame a perdonar y a reconciliarme con los demás. En medio de mis
debilidades sostenme para no apartarme de Ti, Padre Santo, reconociendo tu
grandeza, poder y eternidad en mi vida. Por Cristo Jesús, amén.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario