Domina tu ira…
Comparte esta meditación.
Bendiciones,
Enio.
Meditación Diaria
PROBLEMAS
CON LA IRA
PROVERBIOS
16:32 «Mejor
es el que tarda en airarse que el fuerte; y el que se enseñorea de su espíritu,
que el que toma una ciudad» (RV)
“Más vale ser paciente que valiente; más vale dominarse a
sí mismo que conquistar ciudades.” (NVI)
El 6 de junio de 1944, el comandante
supremo aliado Dwight D. Eisenhower era el hombre más poderoso de la tierra.
Bajo su mando, el ejército anfibio más grande de todos los tiempos se
preparaba para liberar el continente europeo del dominio nazi. ¿Cómo pudo él
comandar un ejército tan inmenso? Parte de la respuesta puede vincularse
con su notoria capacidad para trabajar con distintas clases de personas.
Sin embargo, lo que muchos no saben es
que Ike, como se lo apodaba, no siempre se había llevado bien con la gente. Cuando era muchacho, solía involucrarse en peleas escolares. Pero,
felizmente, tenía una madre que le enseñaba la Palabra de DIOS (La Biblia). Una
vez, mientras le vendaba las manos después que él había tenido una arrebato de
ira, ella citó Proverbios 16:32: “Más vale ser paciente que valiente; más vale dominarse a
sí mismo que conquistar ciudades.”. Años después, Eisenhower escribió: «Al mirar atrás, siempre he considerado
esa conversación como uno de los momentos más valiosos de mi vida». Sin duda,
al aprender a controlar su enojo, Eisenhower fue capaz de trabajar eficazmente
con otras personas.
Inevitablemente, cada uno de nosotros
a veces se ve tentado a reaccionar en
forma airada. No obstante, mediante la obra de DIOS en nuestra vida,
podemos aprender a controlar el enojo. Permitamos que el Espíritu Santo tome
control de nuestras emociones, de nuestra mente y de nuestro corazón. Qué mejor
manera hay de influir en las personas que con un espíritu afable.
La persona
que domina su ira, conquista un enemigo poderoso.
ORACIÓN: Amante Padre
Celestial, hoy quiero rendir a ti esas áreas de mi vida, esas emociones que
tantas veces se manifiestan sin control alguno. Te
ruego que tu Santo Espíritu tome control de ellas de manera que yo pueda
manifestar en todo momento la mansedumbre que caracterizó a tu Hijo Jesucristo.
En Su santo nombre te lo pido, amén.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario