Consejos…
Comparte esta meditación.
Bendiciones,
Enio
Meditación Diaria
ESPÍRITU DE COMPASIÓN
Nuestro Andar Diario
2ª CORINTIOS 1:3-4 “3Alabado sea el DIOS y Padre de nuestro Señor Jesucristo,
pues él es el Padre que nos tiene compasión y el DIOS que siempre nos consuela.
4Él nos consuela en
todos nuestros sufrimientos, para que nosotros podamos consolar también a los
que sufren, dándoles el mismo consuelo
que él nos ha dado a nosotros.”
La vida puede tener
sus momentos embarazosos o de torpeza, como cuando tú u otra persona llegan a
una puerta al mismo tiempo y sucede aquello de: -"Pase usted."- -"No, no, por favor pase usted."- -"No, de verdad, pase usted
primero."-
O cuando te encuentras
en un ascensor con la única persona en el mundo a quien no soportas y te
sientes muy incómodo, que no sabes si salirte del ascensor o no. O cuando
alguien, a quien conoces, pierde un ser querido en la familia y tienes que
conversar con esa persona. Puede ser un momento muy embarazoso porque en
realidad no sabes qué decir.
Y bien,
he aquí unos consejos sobre cómo mostrar que te importa y que tienes un
espíritu de compasión.
Podría ser la
primera vez que hayas tenido que consolar a alguien y tienes miedo de decir
algo desatinado, o de no saber cómo comunicar que te importa de veras lo que
sucede.
No trates de ser
profundo ni de pronunciar un gran discurso. Limítate a ser sincero y cálido en
tus condolencias y a mencionar que te interesas y que vas a orar por eso. Podría
ser suficiente decir: "No sé qué decir, pero siento
mucho lo que te sucede (2ª Corintios 1:3-4).
1.
Haz ofertas sinceras y
prácticas. ¿Te puedo traer algo de comer?
¿Necesitas que te haga algún trabajo? ¿Necesitas que te lleve a algún sitio? ¿Quieres
que te acompañe? Incluso si la persona dice que no, la oferta se agradece.
2.
Ten la delicadeza de que tu
visita sea corta.
3. Ten cuidado de no hacer
comparaciones. La consolación por comparación, sobre
todo al principio, no es bálsamo para la herida.
4.
Evita los clichés. Las frases como: "él se encuentra en un lugar mejor" o
"sólo necesitas tiempo", suenan huecas y sin sentido ante una
verdadera aflicción.
5.
No dejes de preocuparte por la
persona. Después que pasen unos meses, no
olvides que el dolor sigue presente.
Consolar en medio
de la desesperación no tiene por qué ser torpe. Con amor y ternura puedes
ayudar si tienes espíritu de compasión.
Dave
Branon
OREMOS: SEÑOR, te ruego que me ayudes para poder ayudar. Gracias
porque TÚ nos consuelas y podemos llevar a otros ese consuelo de amor. En el nombre
de CRISTO JESÚS, amén.
Visita nuestra página web en la siguiente dirección:
No hay comentarios.:
Publicar un comentario