Hoy puedo realizar una
buena acción al servicio de DIOS.
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meditación.
Bendiciones,
Enio
Meditación Diaria
SENCILLAMENTE HACER EL
BIEN
El Aposento Alto
2ª
TESALONICENSES 3:13 “Pero ustedes, hermanos,
no
se cansen de hacer el bien.”
Junto
a un amigo, recogíamos la basura tirada en uno de los senderos del pueblo.
Levantábamos vasos de café, envolturas de hamburguesas y papas fritas. Al ver a
dos empleados municipales vaciando los cestos de basura, preguntamos si
podíamos sumar nuestra bolsa a la pila que ya habían recogido. «Claro
que
sí», dijeron, «tírenla
allí». Tiramos nuestras bolsas, blancas
y pequeñas,
a la pila de bolsas verdes y grandes que se hallaba en el camión
y nos felicitamos por nuestra buena acción.
Esa
noche, cuando conducía por el pueblo, pasé por el mismo sendero. En medio de la
carretera podía verse nuestra bolsa de basura. Se había caído del camión y el
contenido estaba desparramado por la autopista. Nuestra buena acción no valió
la pena.
Muchas
veces parece que mis buenas acciones salen mal: sostengo una puerta para que
pase un anciano que me responde vociferando que es capaz de hacerlo por sí
mismo; freno para ceder el paso a otro conductor y resulta en un accidente
involuntario. En esos momentos quiero darme por vencida. Es entonces cuando
debo recordar que «hacer
el bien» es un fin en sí mismo.
Aunque nuestros actos de amor parezcan no
tener sentido, servimos a DIOS amando a los otros, y tal servicio es una
bendición.
OREMOS:
Buen DIOS, ayúdanos a ser Tus
manos y pies cuando hacemos el bien como respuesta a Tu amor por nosotros.
Por
Cristo Jesús, amén.
Sra.
K. Ann Smith (Tennessee, EE.UU.)
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