miércoles, junio 21, 2006

NO SÓLO DE PAN VIVIRA EL HOMBRE... (20 Junio 2006)

No sólo de pan vivirá el hombre...
Bendiciones,
Enio

ALIENTO DEL CIELO PARA CADA DIA
Meditación Diaria
por RITCHIE PUGLIESE

ALIMENTO
DEUTERONOMIO 8:3 Y te afligió, y te hizo tener hambre, y te sustentó con maná, comida que no conocías tú, ni tus padres la habían conocido, para hacerte saber que no sólo de pan vivirá el hombre, mas de todo lo que sale de la boca de Jehová vivirá el hombre.

La mejor manera de tener vigor y salud es mantener una dieta equilibrada y realizar buen ejercicio. Nuestro cuerpo, cada día, necesita de los alimentos para fortalecerse. La falta de éllos puede originar debilidad y enfermedad.
Hay personas que se ocupan mucho de su cuerpo exterior, pero descuidan su ser espiritual, que igual al exterior debe ser cuidado y alimentado.
Ser fuerte físicamente no significa serlo espiritualmente. Nuestro espíritu requiere cada día del alimento diseñado por Dios para fortalecerse.
Nuestro alimento espiritual está en la Palabra de Dios (La Biblia), y en la intimidad con Dios por medio de la oración. Si dejamos de alimentar nuestra vida espiritual nos debilitaremos y nos transformaremos en raquíticos espirituales.
Tantas veces alimentamos mal nuestro espíritu escuchando otras voces en vez de la voz de Dios; tenemos puestos nuestros ojos en cosas que no convienen en vez de mantenerlos fijos en el Señor. Todo eso nos hace débiles espirituales e incapaces de vivir en victoria cotidiana.
¿Cómo está alimentando tu espíritu? ¿Lo estás haciendo con los alimentos que Dios quiere?
En la actualidad ¿Estás alimentando bien tu cuerpo, pero te has olvidado de alimentar tu Espíritu?

CONFESION DE FE:
NO SOLO DEL PAN COTIDIANO NECESITO PARA VIVIR SINO TAMBIEN ALIMENTO MI ESPIRITU CON LA PALABRA DE DIOS

ORACION:
Señor, ayúdame a darle importancia a mi espíritu como lo hago con mi cuerpo. No quiero ser sólo una “caja” fuerte por fuera y débil por dentro. Mi espíritu necesita del alimento de Tú Palabra. Hoy decido empezar a leer Tú Palabra de nuevo. Produce en mí el deseo de hacerlo. Te lo suplico en el nombre de Cristo, amén.

No hay comentarios.: