martes, diciembre 27, 2016

LO QUE NOS ENSEÑAN LAS ADVERSIDADES

Con Cristo, podemos tener gozo en cualquier dificultad.
Comparte esta meditación.
Bendiciones,
Enio
Meditación Diaria
LO QUE NOS ENSEÑAN LAS ADVERSIDADES
Ministerios en Contacto
2ª CORINTIOS 12:7-10 ““7 Por eso, para que yo no me crea más de lo que soy, he tenido un sufrimiento, una especie de espina clavada en el cuerpo, que como un instrumento de Satanás vino a maltratarme. Tres veces le he pedido al Señor que me quite ese sufrimiento; pero el Señor me ha dicho: «Mi amor es todo lo que necesitas; pues mi poder se muestra plenamente en la debilidad.» Así que prefiero gloriarme de ser débil, para que repose sobre mí el poder de Cristo. 10 Y me alegro también de las debilidades, los insultos, las necesidades, las persecuciones y las dificultades que sufro por Cristo, porque cuando más débil me siento es cuando más fuerte soy.
         ¿Qué podemos hacer con nuestro dolor cuando, a pesar de nuestras súplicas, DIOS no nos lo quita? ÉL sabe que estamos sufriendo, pero no hace nada. ¿Cómo puede ser un DIOS misericordioso, y no ayudarnos?
         El pasaje de hoy nos da una visión íntima de un asunto muy doloroso en la vida de Pablo. No sabemos exactamente lo que era el “aguijón en la carne”, pero lo que dice que aprendió por medio de esa experiencia es un ejemplo maravilloso de lo que DIOS quiere enseñarnos por medio de la adversidad.
· En primer lugar, DIOS tiene el dominio de la situación. A fin de cuentas, fue ÉL quien permitió el aguijón, y quien tiene el poder de quitarlo.
· Segundo, DIOS da prioridad a lo espiritual. Pablo quería alivio físico, pero el Señor estaba actuando para su bien espiritual. El aguijón era una protección contra el orgullo, el cual habría obstaculizado seriamente el ministerio de Pablo y dañado su carácter. Todo lo que DIOS permite para afligir a los creyentes está concebido para protegerlos del pecado, producir santidad y prepararlos para el servicio fiel a Cristo.
· Tercero, la GRACIA de DIOS es suficiente. El Señor no quitó el dolor, pero le dio a Pablo tanto la gracia para soportarlo como las fuerzas en su debilidad.
  Una vez que entendemos la soberanía, prioridades y suficiencia      del Señor, podemos actuar como lo hizo Pablo: con gozo.
         Cuando el poder de Cristo se perfecciona en nosotros, podemos tener gozo en cualquier dificultad.
         La negativa del Señor a darnos alivio no significa que nos haya abandonado; más bien, es evidencia de Su amor que busca nuestro bien eterno.
ORACIÓN: Gracias Padre Celestial por las pruebas y dificultades que tenemos que nos ayudan a perfeccionarnos espiritualmente para protegernos del pecado, producir santidad y prepararnos para el servicio fiel a Cristo. Gracias Señor. En el nombre de Cristo, amén.
 “7 Por eso, para que yo no me crea más de lo que soy, he tenido un sufrimiento, una especie de espina clavada en el cuerpo, que como un instrumento de Satanás vino a maltratarme. Tres veces le he pedido al Señor que me quite ese sufrimiento; pero el Señor me ha dicho: «Mi amor es todo lo que necesitas; pues mi poder se muestra plenamente en la debilidad.» Así que prefiero gloriarme de ser débil, para que repose sobre mí el poder de Cristo. 10 Y me alegro también de las debilidades, los insultos, las necesidades, las persecuciones y las dificultades que sufro por Cristo, porque cuando más débil me siento es cuando más fuerte soy.


No hay comentarios.: