Ten cuidado…
Comparte esta meditación.
Bendiciones,
Enio
Meditación Diaria
PONER EN PRÁCTICA LO QUE PREDICAMOS
ROMANOS 2:1 3 "Por
tanto, no tienes excusa tú, quienquiera que seas, cuando juzgas a los demás,
pues al juzgar a otros te condenas a ti mismo, ya que practicas las mismas
cosas. Ahora bien, sabemos que el juicio de DIOS contra los que practican tales
cosas se basa en la verdad. ¿Piensas entonces que vas a escapar del juicio de DIOS,
tú que juzgas a otros y sin embargo haces lo mismo que éllos?"
Hace
algunos años a una universidad la acusaron de plagio. Esto
significa tomar los escritos de alguien y hacerlos pasar por propios. Esta
acción es ilegal y es además moralmente incorrecta, cualquiera que sea el
escrito que se ha copiado, pero en este caso lo más impactante fue el hecho de
que esta universidad había plagiado precisamente la sección referente a
“plagio” del
manual de la otra universidad.
El
delito fue descubierto cuando un estudiante de postgrado de una de las dos
universidades, que estaba considerando un empleo como profesor adjunto en la
otra, estaba leyendo el manual de la escuela, y notó que la sección que
advertía a los estudiantes contra el plagio era idéntica a la advertencia que
había en el manual de la primera universidad.
También
Jesús, en el Sermón del Monte enseñó reglas muy claras en relación al juzgar a
los demás. Dice Mateo 7:1-5: “No juzguéis, para que no seáis juzgados. Porque con el
juicio con que juzgáis, seréis juzgados, y con la medida con que medís, os será
medido. ¿Y por qué miras la paja que está en el ojo de tu hermano, y no echas
de ver la viga que está en tu propio ojo? ¿O cómo dirás a tu hermano: Déjame
sacar la paja de tu ojo, y he aquí la viga en el ojo tuyo? ¡Hipócrita! saca
primero la viga de tu propio ojo, y entonces verás bien para sacar la paja del ojo de tu
hermano.”
Quizás
la mayoría de nosotros, si no todos, nos podemos identificar con esa tendencia. Vemos un pecado en la vida de otra persona y nos disponemos
inmediatamente a criticarlo, y muchas veces hasta delineamos la manera de
corregir dicho comportamiento. Pero si somos honestos con nosotros mismos,
podremos ver faltas similares en nuestras propias vidas.
Pide
al Señor que te de discernimiento para reconocer tus fallas y tus debilidades,
y sabiduría para actuar conforme a lo que nos enseña Su Palabra. Ten mucho cuidado de examinarte cuidadosamente antes de
señalar las faltas de los demás, y hazte el propósito de practicar lo que
predicas.
ORACION: Bendito
Padre Celestial, reconozco que me resulta fácil juzgar y mirar despectivamente
a alguien que ha hecho algo que no es correcto. Pero confieso ante Ti que
muchas veces yo he hecho lo mismo que esa persona hizo e incluso aún peor. Te
ruego me ayudes a estar consciente de que esta actitud es totalmente
inaceptable para Ti y capacítame para mirar mis acciones antes de juzgar a los
demás. En el nombre de Jesús, amén.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario