martes, diciembre 20, 2011

SEGUIR EL CONSEJO DE DIOS

Si deseas evitarte muchos…
Comparte esta meditación.
Bendiciones,
Enio

Meditación Diaria 

SEGUIR EL CONSEJO DE DIOS
GÉNESIS 3:6 “Y vio la mujer que el árbol era bueno para comer, y que era agradable a los ojos, y árbol codiciable para alcanzar la sabiduría; y tomó de su fruto, y comió; y dio también a su marido, el cual comió, así como ella”.
Dios procura guiar a sus hijos para que tomemos decisiones sabias. Aunque con frecuencia clamamos a Dios pidiendo Su dirección, no siempre hacemos lo que El indica que debe hacerse. Demasiado a menudo, hemos tomado un curso de acción contrario al que el Señor aconseja en su santa Palabra o al que El manifiesta a nuestra mente y nuestra conciencia a través del Espíritu Santo. Desgraciadamente, no siempre seguimos Su consejo. ¿Qué podemos esperar cuando dejamos de aceptar la voz de Dios, cuando adoptamos decisiones basadas en la lógica o en el criterio humano?
La historia registrada en Génesis 3: 1-7 muestra que Eva enfrentaba un conflicto entre lo que Dios había dicho y lo representado por sus propios deseos. Lamentablemente, decidió creer la mentira y no la verdad, aceptar el consejo del diablo y no el consejo de Dios, dejarse guiar por el que deseaba su ruina y no por el que deseaba su dicha y su felicidad.
Como consecuencia de la fatídica decisión adoptada por ella y por su esposo, el pecado entró en el mundo, con su secuela de dolor, llanto, miseria y muerte.  Eva sabía muy bien lo que Dios requería de ella. Sin embargo, centró su atención en los atractivos de la oferta de Satanás. Sopesó cada opción contra los deseos de su propio corazón y, desgraciadamente, optó por lo que resultaba más agradable para sus ojos.
Cuando seguimos una conducta similar a la de Eva, lo que en realidad decimos a Dios es: «Muchísimas gracias por Tu consejo, pero haré las cosas a mi manera, y no como Tú quieres».
Quizá no expresamos precisamente estas palabras, pero nuestras acciones reflejan ese mensaje. Debemos ser cuidadosos de cómo respondemos a los llamamientos de Dios.
Anhela que o busca y le permitele poner en tu mente Sus pensamientos, para que puedas decidir correctamente. Si pides que te ilumine para tomar decisiones correctas, entonces debes atender a su Palabra. Si deseas evitarte muchas frustraciones, fracasos y pesares, sé obediente y pide fortaleza para seguir el consejo divino.
ORACIÓN: Padre Celestial, reconozco que muchas veces vivo según mis criterios y me dejo guiar sólo por mis impulsos, según mis deseos y haciendo sólo mi propia voluntad. Me arrepiento de no haber seguido Tu consejo. Quiero hacer todo lo que Tú me mandes, practicaré la verdad en amor y me sujetaré a Tu voz. Con Tu presencia en mi vida se que puedo ser firme y obediente.  Quiero seguir unido a Ti, obediente a tu Palabra. En Cristo Jesús. Amén.

No hay comentarios.: