jueves, febrero 18, 2016

NUESTRA FUENTE DE CONSUELO


El Señor no puede romper Sus promesas 
Comparte esta meditación.
Bendiciones,
Enio
Meditación Diaria
NUESTRA FUENTE DE CONSUELO
Ministerios En Contacto
2a CORINTIOS 1:3-4 "Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, Padre de misericordias y Dios de toda consolación, el cual nos consuela en todas nuestras tribulaciones, para que podamos también nosotros consolar a los que están en cualquier tribulación, por medio de la consolación con que nosotros somos consolados por Dios."
La definición de consuelo según el mundo, es el alivio del sufrimiento o de la desesperación. Pero el Señor tiene un concepto diferente. Las adversidades que ÉL permite que lleguen a la vida de un creyente son instrumentos de enseñanza. Debido a que maduramos espiritualmente por medio de la fe, nuestro Padre Celestial no elimina la causa de nuestros problemas, sino que nos da la fortaleza y el aliento necesarios para que nos ocupemos de éllos.
Ya sea que estemos sufriendo o no en este momento, el Espíritu Santo está a nuestra disposición. DIOS envió a su Espíritu a morar dentro de todos los creyentes —de esa manera—, nuestra fuente de ayuda está tan cerca como el corazón que late en nosotros. Nadie más entiende nuestra necesidad de la manera como ÉL lo hace. Cuando nos sentimos incapaces de soportar un segundo más de aflicción, ÉL susurra en nuestra alma: “Sí, sí puedes, porque Yo estoy aquí”. No hay un bálsamo tan curativo como la voz del Espíritu de DIOS.
En algunas circunstancias, el Espíritu dirige nuestra mente a las Sagradas Escrituras. Leer un pasaje, es una manera de escuchar directamente al Señor. El significado y la aplicación personal de un pasaje bíblico pueden no ser evidentes de inmediato, pero DIOS nos hará recordar el versículo cuando más lo necesitemos.
El Señor no puede romper Sus promesas, y Él ha dicho: “Nunca te dejaré; jamás te abandonaré” (Hebreos 13:5 NVI).
ÉL siempre está dispuesto a ayudarnos, Su consuelo está a nuestro alcance y es suficiente para satisfacer nuestra necesidad, sea cual sea el grado de nuestra aflicción.
ORACIÓN: Señor, Padre Celestial. Gracias por las bendiciones que Tú derramas sobre mí y mi familia. Me acerco a Tí buscando Tu ayuda y consuelo para los momentos difíciles que estoy pasando. Ayúdame Señor. En el nombre de Cristo, amén.
2a CORINTIOS 1:3-7 - AFLICCIONES DE PABLO
ACCIÓN DE GRACIAS
Alabado sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, pues él es el Padre que nos tiene compasión y el Dios que siempre nos consuela. Él nos consuela en todos nuestros sufrimientos, para que nosotros podamos consolar también a los que sufren, dándoles el mismo consuelo que él nos ha dado a nosotros. Porque así como los sufrimientos de Cristo se desbordan sobre nosotros y nosotros sufrimos con él, así también por medio de Cristo se desborda nuestro consuelo. Pues si nosotros sufrimos, es para que ustedes tengan consuelo y salvación; y si Dios nos consuela, también es para que ustedes tengan consuelo y puedan soportar con fortaleza los mismos sufrimientos que nosotros padecemos. Tenemos una esperanza firme en cuanto a ustedes, porque nos consta que, así como tienen parte en los sufrimientos, también tienen parte en el consuelo.

 

No hay comentarios.: