lunes, marzo 30, 2009

"PERO RECIBIRÁS PODER..."


"Pero recibirás poder..."
Comparte esta meditación.
Bendiciones,
Enio


Meditación Diaria
por Richard M. Publiese

PODER
HECHOS 1:8 "pero recibiréis poder, cuando haya venido sobre vosotros el Espíritu Santo, y me seréis testigos en Jerusalén, en toda Judea, en Samaria, y hasta lo último de la tierra."

La vida cristiana, sin tener en cuenta el poder del Espíritu Santo, es como que una religión hueca y vacía, llena de preceptos legalistas y aburridos. El Espíritu Santo es la vida del cristiano y de la iglesia. Sin la presencia del Señor el cristianismo pierde su vitalidad.

La diferencia entre el Cristianismo y las demás religiones del mundo es que los hijos de Dios tienen dentro de su ser la viva y fresca presencia del Espíritu Santo, gracias a que un día ellos recibieron a Cristo como su Salvador personal.

La presencia de Dios, el Espíritu Santo, viene a nuestras vidas en el momento mismo de la conversión para darnos las arras o la señal interior de que somos verdader@s hij@s de Dios, pero alli no termina el obrar del Espíritu Santo. Posteriormente debemos buscar la llenura del Espíritu Santo para que nuestra vida interior y exterior rebose de su Santa Presencia.

El pasaje de hoy enseña claramente que, el poder del Espíritu viene luego que haya venido la presencia del Espíritu Santo. Esta presencia se manifiesta en nuestras vidas con el carácter de Dios o lo que comúnmente llamamos el fruto* del Espíritu Santo. Cuando hablamos del poder, estamos hablando de la capacidad que Dios nos da, para que podamos servirle con efectividad llevando el fruto del Espíritu Santo a otros. Todos los hijos de Dios necesitan el poder del Espíritu Santo para glorificar a Cristo. Siempre el Espíritu Santo glorifica a Cristo y lo exalta como el Señor.

Quizás tu cristianismo se ha vuelto en algo rutinario o aburrido, en algo frío y calculable. Este no es el cristianismo que el Señor ha prometido para los suyos. El quiere derramar sobre tu vida, poder del Cielo para que tú disfrutes no sólo la presencia de Dios, sino para que también vivas como más que vencedor cada día de tu vida.

CONFESION DE FE: EL ESPIRITU SANTO SE DERRAMA SOBRE MI VIDA Y ME DA PODER

ORACION:
Señor, estoy cansado de vivir este cristianismo débil y falto de poder. Te pido en este momento que tu presencia me revista de fuerzas del Cielo, para poder vivir un cristianismo victorioso, llevando el fruto del Espíritu Santo a otros. En el nombre de Cristo, amén.
(*) El fruto del Espíritu Santo es amor, alegría, paz, paciencia, amabilidad, bondad, fidelidad, humildad y dominio propio.

No hay comentarios.: