sábado, agosto 23, 2008

UNA GRAN PROMESA...

Una gran promesa...
Comparte esta meditación.
Bendiciones,
Enio


Meditación Diaria
por RITCHIE PUGLIESE

CONDENACION
ROMANOS 8:1
Así pues, ahora ya no hay ninguna condenación para los que están unidos a Cristo Jesús,
porque la ley del Espíritu que da vida en Cristo Jesús, te liberó de la ley del pecado y de la muerte. (Dios Habla Hoy)

Una de las armas preferidas por el diablo para atacarnos son los espíritus de condenación que vienen, como flechas envenenadas, sobre nuestra mente para hacernos caer de nuestra condición de cristianos, perdonados y limpiados por el Señor.

Debemos aprender a manejar esta situación, pues de no hacerlo retrocederemos en nuestro andar con Dios. El enemigo pretende siempre bloquear el obrar de Dios por medio de mentiras.

El enemigo siempre habla a nuestra mente y nos recuerda aquellos pecados que hemos cometido, haciéndonos caer en un sentimiento de frustración, como si aquellos pecados que hemos confesado no estuvieran perdonados por el Señor.

La única manera de frenar este acoso perverso, es mantenerse creyendo lo que Dios dice en su Palabra. El Señor ha prometido que todo pecado confesado es perdonado, limpiado y olvidado.

A partir del momento que confesamos nuestros pecados, El nos ve como si nunca hubiéramos pecado. Si el Señor dice eso de nosotros ¿Quién es el enemigo para decir otra cosa?

La batalla de la mente se gana aferrándose de la Palabra poderosa del Señor y no entrar en “conversaciones” con el enemigo. ¡Dios ya ha hablado con su verdad y no necesitamos oír ninguna voz mentirosa!

CONFESION DE FE: NO VIVO BAJO CONDENACION SINO BAJO EL PERDON DE MI SEÑOR

ORACION:
Señor te pido que me perdones por haber permitido al enemigo llenar mi mente de mentiras, que me han llevado a caer en este estado de frustración. Tú Palabra me dice que todo pecado confesado a Tí ha sido perdonado, lavado y olvidado. ¡Gracias Señor y ayúdame a partir de este momento mantenerme creyendo en lo que Tú has dicho, pues es la verdad!. En el nombre de Cristo. Amén

No hay comentarios.: