Jesús, te estamos
esperando…
Comparte esta meditación.
Bendiciones,
Enio
Meditación Diaria
UNA VISITA MUY ESPERADA
LUCAS 1:79 "...
nos visitó desde lo alto, para alumbrar a los que viven en tinieblas y en medio
de sombras de muerte; para encaminarnos por la senda de la paz."
Las visitas nos
alegran. Cuando sabemos que a nuestra casa llegará una visita, ya sea un
invitado especial, familiares lejanos o amigos, nos preparamos para recibirlos
de la mejor manera posible. Por supuesto que limpiamos y acomodamos la casa,
ofrecemos una buena comida, nos arreglamos con mayor esmero, en fin, hacemos
todo lo que está a nuestro alcance para demostrar aprecio y hospitalidad a
quien viene a vernos. La persona que llega es especial, nos hace sentir
especiales y deseamos que el momento compartido también lo sea.
El Evangelio
nos dice que cuando Jesús llegó a visitarnos no se encontró en un lugar
especial, ni hubo grandes preparativos. El pueblo sabía que el Salvador estaba
en camino, pero nadie estaba a la altura de tan bendita visita. Jesús viene de
lo alto, del cielo, que es la morada del Padre Eterno, a un mundo dominado por
las tinieblas.
Cuando llegó,
en lugar de una fiesta a su alrededor encontró sombras de muerte, porque la
humanidad no tenía otra cosa para ofrecerle. Pero Jesús sabía a dónde venía y
cómo sería recibido, y no se ofendió ni exigió un trato conforme a Su dignidad
celestial.
Al contrario,
con Su visita nos trajo hermosos regalos que vienen a cambiar esa realidad oscurecida
por la sombra mortal del pecado.
Jesús nos da el
regalo de la luz que alumbra nuestra ceguera y abre nuestros ojos para ver la
salvación.
Jesús nos lleva
de la mano para que, con paso firme y seguro, podamos seguir Su camino.
Por último nos
llena de paz, ya que iluminados y guiados por ÉL sabemos que ya no tenemos por
qué temer a la muerte, pues podemos confiar y esperar siempre en Sus promesas.
ORACIÓN:
Señor Jesús, que has venido a cambiar nuestra vida, concédenos que en nuestros
pensamientos y acciones abunde Tu luz, Tu amor y Tu paz. En Tu nombre. Amén.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario