sábado, octubre 23, 2010

GRACIA DIVINA EN TIEMPOS DIFICILES

¿Qué haces…?
Comparte esta meditación.
Bendiciones,
Enio

Meditación Diaria

GRACIA DIVINA EN TIEMPOS DIFICILES
by Charles Stanley
1ª PEDRO 5.6-7 “Humillaos, pues, bajo la poderosa mano de Dios, para que él os exalte a su debido tiempo. Echad toda vuestra ansiedad sobre él, porque él tiene cuidado de vosotros”.
Las dificultades son una realidad siempre presente en nuestro mundo, y es imposible para cualquiera de nosotros escapar del todo de sus garras. ¿Cómo reaccionas cuando se te presenta una dificultad? ¿Intentas escapar, o aguantas estoicamente? ¿Eres de las personas que sufren en silencio, o dejas que todos se enteren de tu problema?
Como creyentes en Jesucristo, por lo general acudimos de inmediato al Señor para pedirle que cambie la situación y nos libere de sus garras. Eso fue exactamente lo que hizo Pablo en cuanto a su “aguijón en la carne”. Rogó en tres ocasiones diferentes que le fuera quitado, pero la respuesta final de Dios fue que ese aguijón continuaría.
Cuando el Señor dice no a nuestras peticiones de alivio, le dice sí a algo aun más grande: a su gracia que todo lo puede. Para Él no hay ningún aguijón demasiado grande del que no pueda ocuparse. Nuestro amoroso Padre celestial jamás te dará a una prueba sin proporcionarte también Su abundante fortaleza para sobrellevarla. Los sufrimientos que Dios permite en nuestra vida son con un buen propósito de Su parte. El aguijón del apóstol era para darle exactamente lo que él necesitaba: humildad. El Señor cuida de ti y te ama de la misma manera que hacía con Pablo, y Su intención es hacerte bien.
Quizás tú estás atravesando adversidades. ¿Has dejado tu aguijón en manos del Señor o estás tratando de sacártelo con tus propias fuerzas? Dios se propone hacer algo grande en tu vida cuando te permite seguir con tu sufrimiento, pero te dará la gracia para superarlo. Coopera con el Señor, y regocíjate en la sabiduría y la suficiencia de Él.
ORACIÓN: Gracias mi Señor porque en Ti puedo encontrar esa paz y tranquilidad que sólo Tú puedes dar. Ayúdame Padre Celestial para superar mis problemas y dificultades. En Tus manos pongo todo para que Tu las transformes en bendiciones. Gracias por las muestras de Tu amor. Por Cristo nuestro Señor, amén.

No hay comentarios.: