CIERTAMENTE LA COSECHA ES MUCHA, PERO LOS TRABAJADORES SON POCOS...

Ciertamente la cosecha es mucha, pero los trabajadores son pocos...
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Bendiciones,
Enio

ALIENTO DEL CIELO PARA CADA DIA
Meditación Diaria
por RITCHIE PUGLIESE

SERVIR
MATEO 9:37-38
“Entonces dijo a sus discípulos: A la verdad la mies es mucha, mas los obreros pocos. Rogad, pues, al Señor de la mies, que envíe obreros a su mies.” (Reina y Valera)
"Dijo entonces a sus discípulos: -Ciertamente la cosecha es mucha, pero los trabajadores son pocos. Por eso, pidan ustedes al Dueño de la cosecha que mande trabajadores a recogerla." (Dios Habla Hoy)

Hace algunos años hablando con un hombre de Dios, me dijo algo impactante que revolucionó mi vida cristiana. El dijo: “Cuando el Señor nos llama diciendo “venid”, lo hace con un doble significado: 1) Ven a mí; 2) Id a servirme.

Nunca había pensado que en la gramática espiritual de Dios “Venid” tuviera el doble significado: “Ven e id”, es decir que somos salvos por la Gracia de Cristo para servir en la obra de Cristo.
Existen cristianos que sólo se conforman con asistir a la iglesia y nunca se incorporan a la vida de la iglesia. Son asistentes espirituales que nunca ejercen sus talentos y dones espirituales. El trabajo para hacer en el Reino de Dios es mucho, y el pasaje de hoy está diciendo que los obreros son pocos.

¿De que lado TÚ estáS? ¿Del lado de aquellos que sólo se conforman con asistir a los servicios de la iglesia una vez a la semana? ¿O del lado de aquellos que obedecen el “id” del Señor y se ponen en las manos del Maestro para ser utilizados por El en su obra?

Dios siempre usa a aquellos que están disponibles. ¿Tú, lo estás?

CONFESION DE FE:

EL SEÑOR ME HA LLAMADO PARA IR Y SERVIRLE. POR ESO DEJO LA PASIVIDAD Y ME DISPONGO A QUE EL ME USE CON SU PODER DE LO ALTO.

ORACION:

Perdona mi pasividad Señor. Tantas veces el cansancio, el trabajo, los quehaceres de la casa pretenden que sólo vayamos a Tu Casa a “calentar un asiento” y ser un cristiano asistente. Renueva mi vida en este momento y Te pido que transformes mi pasividad en actividad en las cosas de tu Reino. ¡Gracias por darme esta nueva oportunidad! Por Cristo Jesús, amén.