¿PROBLEMAS? ¿DIFICULTADES?

¿Problemas? ¿Dificultades?
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Bendiciones,
Enio

Meditación Diaria
por Richard M. Publiese

AUTORIDAD

EXODO 14:21 Y extendió Moisés su mano sobre el mar, e hizo Jehová que el mar se retirase por recio viento oriental toda aquella noche; y volvió el mar en seco, y las aguas quedaron divididas.

Cuando leemos el impresionante relato de cómo Dios libertó a su pueblo de las garras de Egipto y del Faraón, no podemos dejar de resaltar la valentía de Moisés, el caudillo libertador bajo el mandato de Dios. Para nosotros hoy es común leer que Moisés tomó una vara, la levantó creyendo lo que Dios le había dicho (Ex. 14:16) y dividió las aguas del Mar Rojo. ¿Qué hubieras hecho tú en esa situación? No todos hemos sido llamados para abrir las aguas del Mar Rojo y escapar de los egipcios, pero en un sentido espiritual Dios nos ha dado armas para vencer al mundo y abrir caminos nuevos por la fe. Los egipcios representan para nosotros hoy, la presión del mundo y del diablo sobre el pueblo de Dios, que quieren empujarnos para que nos ahoguemos en las aguas de la desesperación y el fracaso.

En este tiempo Dios quiere darnos una nueva salida a las presiones que estamos viviendo. Ya sea el diablo, las circunstancias adversas, los problemas o las dificultades, etc., Dios nos ha dado Su “vara”, es decir la autoridad y Su poder, para que nosotros en el Nombre de Cristo realicemos lo que humanamente es imposible hacer.

Si hoy tú te encuentras en una situación similar a la que atravesó el pueblo de Israel y Moisés, donde te ves humanamente acorralado por los enemigos, recuerda la autoridad que Dios nos ha entregado en nuestras manos. ¡Utilízala en el Nombre del Señor, y el Mar Rojo de tu vida se abrirá para que tú pases al otro lado sano y salvo; además verás a tus enemigos vencidos!

CONFESION DE FE:
TENGO LA AUTORIDAD DE DIOS, EN EL NOMBRE DE JESUS, PARA VENCER A MIS ENEMIGOS

ORACION:

Perdóname Señor, por no usar la autoridad espiritual que Tú me has dado en Cristo Jesús. Gracias porque Contigo es posible vencer a mis enemigos. ¡Te alabo Señor! En el Nombre de Tu Hijo Amado, amén.